martes, 9 de septiembre de 2008

Eli


Los recursos literarios me tienen cansado. El otro día un amigo me escribió una carta donde justificaba todo su accionar literario basado en "los recursos". Le repliqué que era un latero inmune. Que no poseía sustancia, y que si no tenía nada más que decir, que mejor se dedicara a otra cosa. Quizás por eso también me echaron del PeZcadores (hace como tres días atrás). Cuando finalizaba el postre, el mozo se acercó y me preguntó si la comida había estado a la altura de las circunstancias. Le respondí que lamentablemente no iba a volver a ese cochitril, y que el restorán tenía mucha apariencia, pero muy poca consistencia. El garzón, que mentecato no era, empezó a justificarse con Kant y Aristóteles, y continuó con argumentos inspirados en la Filosofía de Isla mezclado con tintes Licanteanos. Finalmente, concluyó su discurso recitando un poema de Pablo de Rokha o Carlos Díaz Loyola. Al comienzo sólo atiné a contemplar aquel acto; me sentía estupefacto, y quizás lo justificaba, pero luego (y sin pensarlo) me levanté y le propiné un cornetazo en plena nariz: sonó horrible. La gente presente enmudeció. En menos de lo que canta un gallo, dos tremendos Aimaras me tomaron por los brazos y me sacaron a patadas del lugar. Afortunadamente no quedé muy moreteado, quizás porque no me golpearon en serio. Uno de ellos incluso me hizo un guiño mientras rozaba mis testículos, demostrando sutilmente su críptica homosexualidad y por qué no decirlo también, su alegría por ver a ese garzón homofóbico lastimado. En la reflexión a posteriori, me quedó claro que lo extraño de mi conducta no había sido la violencia propiamente tal, sino que la violencia sin estar borracho ni aliñado. No sé qué pasó por mi mente, simplemente sucedió. Esa misma noche, y mientras caminaba por una hermosa plaza Sanhattina a eso de las 2 y 23 de la mañana, sonó mi celular, era la Eli; dijo que no podía dormir, que me fuera a su departamento, que me echaba de menos, que quería besarme y acariciarme: ¡apúrate!, sentenció. Finalmente y luego de caminar a cencerros tapados, llegué a Thiago esquina con Sofía, oprimí el timbre del 604, el portón del edificio se abrió de inmediato. Una intensa emoción recorrió mis ventrículos. Al llegar a destino, toqué la puerta en síncopa, ella abrió y me miró a los ojos encontrándome casi al instante; tomó mis manos, las apretó contra sus pechos y susurró besándome al oído: te necesito ahora, ¿right?

6 comentarios:

Hans dijo...

Lejos lo que más me ha gustado del Professor Tigre Tom. Harto recurso, renegando de los recursos. Justo ahora no recuerdo haber leído algo similar, digo...con esa idea... anybody?
A medida que leía el cuento, me iba sorprendiendo cada vez más que Major Tom hubiese dejado de lado su fetiche más clásico al escribir...hasta que el matón Aymara le guiño el ojo cuando le rozó un testiculo.. jaja.. ahi me di cuenta que efectivamente, el cuento lo había escrito el mismo Noib de siempre. Hay un desenfado alegre en este cuento...será que Bugarde está más contento y menos stressado?...
Al parecer, en Sanhattan y en Manthiago hay hartas Elis por ahi... lo que no es malo... hasta que alguno de los dos cruza el temible umbral que da camino al enamoramiento... mientras tanto... mejor que llame cuando se le ocurra... right?

pez dijo...

Me gustó mucho su post señor Vega. Principalmente porque sentí que por primera vez leo al V-Z desvestido de esa ironia violenta soterrada que aparece en sus otros relatos. Sentí que aquí el hilo conductor de la historia no es ni el tiempo, ni las intenciones, ni siquiera un argumento narrativo, sino que una melancolía honesta del personaje. Una especie reaccionar interno que lo lleva a rechazar complicado y luego a aceptar lo simple. Un destacar la belleza en la dulzura simplona de lo verdadero y puro. Me recordó a Oliveira de Rayuela. Muy güeno. ><>

noib dijo...

gracias por los coments estimados.
una de las razones por la q me gustó este cuento, es porq Pedro Bleiq fluye, para bien o para mal, pero fluye. otra cosa q me intriga y q aun no tengo claro, es el garzón, q sin duda alguna, se le puede sacar punta.
y para finalizar, no puedo dejar pasar a Eli, ¿right? según Bulnes, q al menos en NY, las Elis andan dando vueltas por ahí. lo q siempre es bueno.

un abrazo

Matias Bulnes dijo...

Definitivamente, les aseguro q las Elis andan dando vuelta por NY. De hecho está lleno de Elis. El problema es encontrarlas. NY tiene el sino de la biblioteca de babel de Borges: hay tanto de todo q es muy difícil encontrar un poco de algo. Pero con persistencia uno termina encontrando.

Respecto del trabajo de profesor Vega, adhiero a la opinión general q está muy bueno, quizá lo mejor q haya escrito Tom. Como dice Hans, parte un poco unlike-Tom pero al final quedé con la sensación q conservaba el leitmotiv vegaciano. Leer los escritos de Tom es como jugar jugar al Principe de Percia: hay misterios por todo el trayecto y uno nunca sabe si tomó el camino correcto. Tom nos cambia constantemente el curso esperado de los acontecimientos prescindiendo de uno hilo conductor. Por eso q sus escritos son Buñuelescos; porq no se rigen por la coherencia mundana sino por las flexibles leyes del flujo de pensamientos... onda Joyce.

Tb quisiera destacar el disclaimer al ppio de la obra sobre los recursos literarios. Es divertido q Tom se anticipa al juicio sobre su trabajo advirtiendo q los estándares literarios lo tienen cansado y adelantando sutilmente la rebeldía literaria de lo q sigue. Pero es aún más divertido q lo q está haciendo es usar a su vez un recurso literario. Hay cosas de las q no se puede escapar. La historia del arte está hecha de intentos de romper con el arte.

Quisiera por último preguntar por un par de palabras: "Licanteanos" y "cencerros." Errores? Touchés? In-jokes? Agradezco cualquier iluminación.

Me disculpo sinceramente por el tardío comentario. Abrazos.

noib dijo...

aclaración requerida: Pablo de Rokha nació en Licantén, así q en este cuento, "Licanteano" es sinónimo de provinciano. y "a cencerros tapados", es un forma ridícula para decir que caminó cautelosamente.

estimados, quisiera comentarles q una buena cosa q ocurre en los PCs es q cada comentario en si, es un tremendo aporte para visualizar lo q realmente salió. sin duda alguna, esto es precisamente una de las cosas q más me gusta de trabajar en grupo.

ffredes dijo...

Vuelvo a disculparme por el retraso (aun me queda otra disculpa) pero fui atrapado por las playas nortinas.
Puta esto de comentar al ultimo es pesimo, por que hay mucho dicho.
Me gustó el cuento, es liviano, muy entretenido y tiene un poquito de melancolía como dice pez, en el actuar errático del personaje. Claramente es un Tomas mas desnudo, casi libre de su escudo protector: su ironía pornográfica. Al final eso hace que el cuento sea mas amigable por que no hay que buscar al Tomas. El garzon letrado es lo mejor del cuento, descoloca y la escena es muy divertida y bien relatada. I like it.
Saludos.